Tesis:
Cerramientos y trazas de montea de Ginés Martínez de Aranda
- Autor: CALVO LOPEZ, José
- Título: Cerramientos y trazas de montea de Ginés Martínez de Aranda
- Fecha: 2000
- Materia: Sin materia definida
- Escuela: E.T.S. DE ARQUITECTURA
- Departamentos: IDEACION GRAFICA ARQUITECTONICA
- Acceso electrónico:
- Director/a 1º: RABASA DIAZ, Enrique
- Resumen: El arquitecto y cantero Ginés Martínez de Aranda (1556-1620) compuso alrededor de 1600 un manuscrito llamado "Cerramientos y trazas de montea" y dedicado casi exclusivamente al problema del despiece de piezas de cantería, lo que hoy conocemos por estereotomía. La Tesis estudia los procedimientos concretos de trazado y labra que se exponen en la obra, pero también las reflexiones sobre arquitectura y cantería que se incluyen en su prólogo. El Estudio preliminar trata la biografía de Aranda, el manuscrito en sí, los instrumentos y métodos de trazado y labra, y las cuestiones planteadas por el proemio, mientras que el Texto comentado pasa revista detallada a cada una de las "difinitiones" y trazas en las que se divide el texto. Esto permite analizar las aportaciones originales de Aranda, como la primera aparición en los textos de los arcos capialzados y en vuelta de horno, el tratamiento sistemático de los arcos esviados y abocinados, en paramentos curvos y en bóvedas y una larga serie de capialzados, incluyendo versiones primitivas de los tres célebres arquetipos franceses, el de Marsella, el de Montpellier y el de San Antonio. A la vista de estas aportaciones de Aranda, consideramos que no se puede seguir sosteniendo la visión de la cantería del Renacimiento Español como un saber estático y exclusivamente empírico. El saber de Aranda tiene indudablemente raíces medievales que se manifiestan en puntos como los instrumentos de labra, o la práctica de los trazados a tamaño natural sobre el suelo, que no se abandona porque proporciona una exactitud que los dibujos a escala no pueden garantizar. También es tradicional una idea expresada con firmeza por Aranda: el arquitecto precisa de una formación que sólo puede ofrecer la práctica y el conocimiento directo de los oficios. Pero al mismo tiempo se percibe claramente que esta formación no es suficiente para el arquitecto del siglo XVI, pues el Renacimiento aporta nuevos instrumentos, contenidos y problemas que van a transformar completamente este saber tradicional por la completa renovación del catálogo de "trazas" a principios del siglo XVI. La ciencia desempeña un papel central en este saber renovado; en especial la geometría sigue estando presente en los trazados generales en planta, permite sofisticados diseños de elementos de detalle, forma el núcleo central de la estereotomía renacentista o resuelve problemas de diseño estructura. A la vista de lo expuesto, creemos que no se puede mantener la visión de la cantería hispánica del siglo XVI como una práctica medieval y retardataria, sino como un saber estructurado por principios vitruvianos como el del conocimiento de todas las ciencias o la dualidad entre "fabrica" y "ratiocinatio", que no renuncia a lo que encuentra útil en la tradición constructiva medieval sino que busca potenciarlo con la geometría euclídea; un saber puesto al servicio del repertorio formal renacentista, que no se encierra en el compartimento estanco de la práctica constructiva ni se concibe con un carácter meramente instrumental, sino que permite y alimenta un experimentalismo formal que acabará desempeñando un papel relevante en la arquitectura barroca