Tesis:
El barrio de Malasaña o la amenaza de la renovación urbana (Un estudio de sociología urbana)
- Autor: ESTELLES ZAPATA, Juan Francisco
- Título: El barrio de Malasaña o la amenaza de la renovación urbana (Un estudio de sociología urbana)
- Fecha: 1983
- Materia: Sin materia definida
- Escuela: E.T.S. DE ARQUITECTURA
- Departamentos: SIN DEPARTAMENTO DEFINIDO
- Acceso electrónico:
- Director/a 1º: GOMEZ-MORAN Y CIMA, Mario
- Resumen: El desconocimiento de la realidad profunda de nuestras ciudades es una constante en el que hacer cotidiano de los que tienen la responsabilidad de la acción sobre el medio urbano: desde el diseño hasta la ordenación del territorio pasando por la arquitectura edificatoria y la planificación urbana. El presente trabajo pretende dar el énfasis necesario al conocimiento previo y riguroso de la ciudad sobre la que se va a operar, conocimiento que, en la mayoría de los casos, está suplido por la intuición o por una acumulación de datos irrelevantes. Asimismo se intenta devolver el protagonismo al habitante anónimo de la ciudad para que su voz pueda ser oída sin intermediarios de ningún tipo. Es hora de que toda acción sobre la comunidad deba realizarse al servicio de la misma y no buscando servir a intereses más o menos oscuros. Por eso creemos que la participación ciudadana debe estar presente desde el comienzo de cualquier proyecto y que debe incorporarse a su metodología como una parte inseparable. Se ha elegido el barrio de Malasaña porque posee unas características especiales, que le hacen objeto apetecible de una investigación de este tipo. No posee elementos históricos o artísticos de primera magnitud, que harían indiscutible su conservación a ultranza. La conservación o renovación debe basarse, creemos, en la conciencia colectiva de sus habitantes. Además, dicho barrio ha sido objeto en los últimos años de un proceso de urbanismo no realizado, cuyas etapas resultan interesante investigar. Como introducción teórica, se ha realizado un recorrido bibliográfico por los textos más representativos de la teoría de la ciudad: desde los más antiguos y con mayor ardor renovador a los más modernos y conservadores de la forma y contenido del medio urbano. La investigación propiamente dicha ha comenzado con un apunte histórico, en el cual se han ido desvelando las transformaciones que ha sufrido la ciudad antigua, basándose en la cartografía de Madrid existente, hasta llegar a la configuración actual. El análisis del medio físico nos ha llevado al conocimiento de la masa edificatoria, con un escaso número de edificios singulares y con caserío anónimo con personalidad suficiente para hacer desistir de cualquier acción renovadora. Los espacios públicos responden a necesidades y módulos de otras épocas, por lo que resulta problemática su adaptación a las necesidades presentes. El uso predominante del barrio es el residencial, con una proporción muy equilibrada de dotaciones comerciales en las plantas bajas y una pequeña proporción del sector terciario. El equipamiento colectivo es, sin embargo, muy irregular y releva grandes desfases y carencias muy acusadas. Quizá sea éste el problema más grave por la dificultad de poder materializar en suelo urbano toda una teoría de estándares dotacionales. La vivienda ha ido incorporando lentamente las mejoras tecnológicas que el desarrollo iba produciendo. No obstante, el retraso es considerable, agravado por la forma mayoritaria de posesión que es el inquilinato y las derivaciones subsiguientes de la actual legislación sobre la materia. El estudio de opinión, realizado a través de encuestas cerradas y abiertas, nos ha deparado un panorama en el que se presenta una dualidad tradicional - moderna, característica de los centros históricos, en los que sobre una base, producto de la historia, se han ido acumulando sucesivas aportaciones de las corrientes innovadoras. Ello ha dado como resultado un sistema de valores en continua evolución y permanente búsqueda de ajuste y equilibrio. El planeamiento urbanístico sobre el barrio ha pasado por tres etapas en los últimos años, que son una muestra de cómo sentir la realidad urbana y que denominamos: planeamiento autocrático (Plan de la Gran Vía Diagonal de 1949), planeamiento tecnocrático (Plan Malasaña de 1975) y planeamiento democrático-demagógico (Plan Villa de Madrid de 1980), y que representan el cambio de mentalidad existente en la política municipal madrileña. El trabajo se concluye con el análisis de los mismos y con una última llamada para que nuestros planificadores concedan mayor interés al estudio de la realidad, sobre todo la derivada de la opinión colectiva de sus moradores