Tesis:
Viviendas de cine. Análisis de la arquitectura residencial en el marco del cine europeo de las últimas décadas
- Autor: SALGADO DE LA ROSA, María Asunción
- Título: Viviendas de cine. Análisis de la arquitectura residencial en el marco del cine europeo de las últimas décadas
- Fecha: 2004
- Materia: Sin materia definida
- Escuela: E.T.S. DE ARQUITECTURA
- Departamentos: PROYECTOS ARQUITECTONICOS
- Acceso electrónico: http://oa.upm.es/9156/
- Director/a 1º: MUÑOZ JIMÉNEZ, María Teresa
- Resumen: De entre todas las líneas teóricas abordadas en el análisis de la relación que se establece entre arquitectura y cine es, sin duda, el vínculo psicológico que se genera entre las imágenes espaciales proyectadas y el espectador, la que resulta más relevante. Este aspecto afecta básicamente a la transformación o bien a la consolidación de los esquemas arquitectónicos seleccionados, por ser la teoría que más peso tiene en el contexto de los intereses de la población que la consume. En lo que al tratamiento de la arquitectura residencial en el cine se refiere, en un principio, los primeros testimonios documentales en los que arquitectos y cineastas se involucraron en proyectos comunes coinciden con la celebración del tercer encuentro del CIAM (Congrès Internacional de l`Architecture Moderne) y del segundo encuentro del CICI (Congrès International du Cinéma Indépendant), en 1930, en Bruselas. Inicialmente era más la fascinación que los arquitectos sentían hacia el reciente invento que a su capacidad real de difundir imágenes e ideas arquitectónicas. En cambio, en las décadas siguientes, la relación real entre vivienda y cine se verá influida por una serie de tendencias que los directores han seguido a tenor de las demandas y los valores expresados por una sociedad. En el proceso de selección de las arquitecturas contemporáneas que han de servir de escenario a una serie de sucesos narrados en tono actual, la mayoría de los cineastas que no ignoran la desconfianza que ofrece para el gran público aquellas construcciones domésticas de viviendas herederas del movimiento moderno, se decantan por evitar aquellas arquitecturas que no sean del agrado del espectador. En su defecto, seleccionan arquitecturas domesticas como las de Wright en América o los arquitectos modernistas en Europa, cuya aparición repetida señala su aceptación por encima de los dictados de las modas, y relega a las restantes arquitecturas contemporáneas a servir de escenario estereotípico a sus personajes. Al margen de los tópicos acerca de la utilización de las arquitecturas herederas del movimiento moderno corno frías ambientaciones de sociedades futuras o personalidades inestables, observamos que la evolución de la vivienda en el cine discurre pareja, muchas veces, a propuestas espaciales concretas lanzadas desde el cine a modo de experimentación. La utilización por parte de algunos arquitectos, conocedores de la importancia de la percepción psicológica de las imágenes, de referencias visuales aprehendidas a través del cine, apunta a la existencia real de una dependencia visual, de la que son esclavos todos aquellos que se han desarrollado profesionalmente en el contexto de una cultura puramente audiovisual. Arquitectos corno Jean NouveI o Rem Koolhas se consideran devotos seguidores de las imágenes cinematográficas, al igual que cineastas corno Wim Wenders o Antonioni persiguen con obsesión arquitectónica unos mundos visuales capaces de refrendar la ligereza de sus argumentos. Por encima de lo puramente estético o visual, debido a que la evolución del cine ha discurrido paralela a los acontecimientos del siglo XX, a menudo las filmaciones de ficción han sido testigos discretos de los cambios acontecidos en las vidas de los ciudadanos. El cine, por ejemplo, ha dejado testimonio gráfico de la progresiva mecanización del hogar, pulsando los miedos de unos y la curiosidad de otros, a través de representaciones amables e, incluso, cómicas de directores que llevaron en sus películas la modernidad al absurdo corno Jaques Tati o Blake Edwards. Junto a esto, la invasión del universo televisivo, en el contexto doméstico, no sólo motivó un cambio en la temática elegida por los cineastas sino que retrató toda una nueva configuración de vivienda, en la que las familias destinaron casi todos sus momentos de ocio a concentrarse frente al televisor. En esta misma línea, el cine ha mostrado con anticipación a su implantación popular, los beneficios y los problemas que acarrea la invasión de las nuevas tecnologías en un ámbito doméstico, ofreciendo una crítica visual sin paliativos de cómo, en la realidad de muchos de los casos, la arquitectura de las viviendas no ha evolucionado al mismo nivel o cómo, sencillamente, su evolución no ha sido aceptada de la misma forma a través de los ojos del gran público. Algunos directores de cine corno Truffaut, Stanley Kubrick o RidIey Scott han trasladado la fascinación que sentían por todos aquellos avances tecnológicos al contexto de la vivienda tradicional en sus películas. Mediante el estudio riguroso de la perspectiva real de la ciudad y los avances tecnológicos de cada momento, estos directores han planteado las que han sido, sin lugar a dudas, las hipótesis estéticas de los futuribles más creíbles de la historia del cine. La vigencia de sus imágenes, obtenida mediante una cuidadosa selección de los espacios urbanos fotografiados, ha sobrepasado incluso la barrera temporal impuesta por sus propios argumentos. Más allá de las propuestas espaciales presentes en el cine de ciencia ficción, la rápida transformación de los núcleos urbanos aún nos sorprende más cuando la vemos con cierta perspectiva, retratada en el cine. El tejido urbano, compuesto básicamente por viviendas, ha supuesto a la vez el escenario idóneo para la narración de historias cotidianas. Los diferentes entornos domésticos y las transformaciones aplicadas en las zonas residuales de las urbes son reinventados desde el cine a través de la creación de entornos ideales posibilitados, mediante los mecanismos y herramientas que posee un medio de difusión como es el cine Estas maniobras de co1lage fotográfico nos han permitido contemplar marcos de vivienda imposibles, diseñados a la medida de nuestros sueños. La progresiva imposición de la vivienda, como tipología capaz de acaparar el discurso arquitectónico, ha encontrado en el cine una ventana desde la que los individuos pueden contemplar una tipología que a menudo se muestra inaccesible. A su vez, el cine, como testigo de los acontecimientos de una sociedad, no solo ha sido cronista de la construcción masiva de viviendas en los años posteriores a la II Guerra Mundial, sino del impacto que esas arquitecturas símbolo del bienestar han producido en el contexto de la ciudad que conocían.