Tesis:

Modelización de las deformaciones corticales en El Salvador (Centroamérica) mediante la integración de datos geodésicos (GPS), geológicos y sismológicos.


  • Autor: STALLER VAZQUEZ, Alejandra

  • Título: Modelización de las deformaciones corticales en El Salvador (Centroamérica) mediante la integración de datos geodésicos (GPS), geológicos y sismológicos.

  • Fecha: 2014

  • Materia: Sin materia definida

  • Escuela: E.T.S.I. EN TOPOGRAFIA, GEODESIA Y CARTOGRAFIA

  • Departamentos: INGENIERIA TOPOGRAFICA Y CARTOGRAFIA

  • Acceso electrónico: http://oa.upm.es/29172/

  • Director/a 1º: BENITO OTERINO, María Belén
  • Director/a 2º: MARTINEZ DIAZ, José Jesús

  • Resumen: El Salvador se encuentra en el norte de Centroamérica, en el margen activo del noroeste de la placa Caribe. Enmarcado en el límite entre las placas del Coco y Caribe, caracterizada por la subducción de la primera bajo la segunda a una velocidad que supera los 70 mm/a, es uno de los países centroamericanos con un régimen tectónico más complejo. Esta convergencia se traduce a la vez en la existencia de un sistemas de fallas de desgarre en el continente alineadas con la cadena volcánica con una importante actividad. La velocidad de la mayor de este sistema de fallas, la Zona de Falla de El Salvador (ZFES), que atraviesa el país de este a oeste, alcanza los 14 mm/a y es responsable de terremotos frecuentes, algunos de elevada magnitud, como el terremoto del 13 de febrero de 2001 con magnitud Mw 6.6. Esta tesis es una aportación dentro del objetivo de la caracterización del comportamiento de las fallas activas en la zona con el fin de mejorar la evaluación de la amenaza sísmica en El Salvador. En ella se utiliza la capacidad de las técnicas geodésicas, como el GNSS, para determinar el campo de velocidades asociado a la ZFES en el período intersísmico, permitiendo estimar las deformaciones que se producen en la zona así como el grado de actividad y comportamiento actual de la ZFES. Además, mediante la aplicación de un modelo cinemático de bloques elásticos, integrando datos geodésicos, geológicos y sismológicos, se estiman los movimientos de los bloques y la acumulación de deformación elástica en las fallas que delimitan los bloques. Los parámetros así obtenidos son integrados en el cálculo de la peligrosidad sísmica, permitiendo analizar su grado de implicación en la evaluación de la amenaza sísmica de El Salvador. El campo de velocidades obtenido indica que el patrón de deformación es típico de una falla de desgarre bloqueada. Las velocidades obtenidas muestran una tectónica claramente de desgarre dextral a lo largo de la ZFES y sugieren que el límite entre los bloques antearco salvadoreño y Caribe es una zona de deformación que varía a lo largo de la ZFES de oeste a este. Se estima un movimiento a largo plazo del antearco salvadoreño de 13.5 ± 1 mm/a en dirección ~NO relativo a la placa Caribe. La distribución de la deformación a lo largo de la ZFES ratifica la transferencia de la deformación desde los segmentos occidentales de la ZFES hacia estructuras extensionales distribuidas en una amplia zona en la terminación oriental de la zona de falla. A partir de los resultados de la modelización, se excluye la existencia de una estructura simple con una zona de deslizamiento única a lo largo del arco volcánico en El Salvador, siendo evidente la necesidad de introducir dos bloques intermedios entre los bloques principales Caribe y Antearco; uno situado en el golfo de Fonseca que sirve de transición entre el movimiento de los antearcos salvadoreño y nicaragüense, y otro en la zona central de El Salvador. Se estima que las fallas del arco volcánico salvadoreño están casi totalmente bloqueadas. Nuestros resultados ratifican que el grado de acoplamiento en la interfase de la zona de subducción frente a las costas salvadoreñas es prácticamente nulo. Los resultados obtenidos en esta tesis permiten mejorar la estimación de la amenaza sísmica en El Salvador, permitiendo introducir algunas fallas modelizadas como fuentes sismogenéticas independientes. Para ello se han calculado distintos mapas de amenaza sísmica, introduciendo únicamente las fallas, donde se obtienen valores máximos de aceleración pico (PGA) que alcanzan los 0,6 g, en las proximidades de algunas fallas.