Tesis:
Consecuencias sobre las agriculturas regionales de la adhesión de España a las Comunidades Europeas.
- Autor: GARCIA AZCARATE, Tomás
- Título: Consecuencias sobre las agriculturas regionales de la adhesión de España a las Comunidades Europeas.
- Fecha: 1984
- Materia: Sin materia definida
- Escuela: E.T.S. DE INGENIEROS AGRONOMOS
- Departamentos: ECONOMIA Y CIENCIAS SOCIALES AGRARIAS
- Acceso electrónico: http://oa.upm.es/4300/
- Director/a 1º: LAMO DE ESPINOSA, Jaime
- Resumen: El doctorando pretende ofrecer una visión integradora del sector agrario español, de las distintas agricultoras que coexisten en nuestro país, contribuyendo a aportar elementos de respuesta racional a los interrogantes que plantea nuestra adhesión a las Comunidades Europeas. Antes de abordar directamente el objeto de este estudio, nos ha parecido conveniente analizar, por un lado, el impacto regional de la Política Agraria Común (PAC), y, por otro, la realidad de las actuales agriculturas regionales. De la parte primera cabe. destacar el análisis de los estudios realizados por la comisión y el capitulo final, titulado El problema regional y la reforma de la PAC. En nuestra opinión, y a pesar de las dificultades que puedan existir a corto plazo, debe avanzarse hacia la diferenciación entre política de precios agrarios y política social de cara a las agricultores, reservando a los precios agrarios un papel prioritario en el funcionamiento de los mercados. En este caso, no cabe descartar la existencia de subvenciones directas, exenciones fiscales, o cualquier otro mecanismo que compense a los agricultores familiares sin generar superbeneficios en los estratos más productivos de los empresarios agrarios. El interés de la parte segunda se centra en la utilización del análisis factorial (componentes principales) posteriormente, análisis en nubes dinámicas para obtener una radiografía de las distintas agriculturas provinciales y regionales, que posibilitará en las fases posteriores de la investigación una buena interrelación entre los análisis por productos y por ámbitos espaciales. En la parte tercera se procedió a un estudio de las consecuencias que, sobre las distintas Comunidades Autónomas (CCAA), puede tener la evolución previsible del grado de apoyo de la Administración al sector agrario y del gasto en intervenciones en los mercados agrarios. A pesar de los desequilibrios en el grado de apoyo de la PAC a las regiones comunitarias (analizados en la parte primera de esta investigación), podemos concluir que la sustitución de la actual política agraria española no incrementaría las diferencias interregionales en el grado de apoyo efectivo de la Administración a la gestión de los mercados agrarios. Se pone de manifiesto (en la parte cuarta) las tensiones y competencias interregionales en el seno mismo de cada producción y, asimismo, se estudian las consecuencias de las principales iniciativas de política agraria a nivel del Estado. Se advierte en particular qué medidas convenientes, desde el punto de vista regional, pueden resultar desequilibradoras a nivel sectorial y nacional, señalándose numerosos casos concretos tanto en la producción ganadera como en la agrícola. La necesaria profundización de la problemática regional de los principales productos agrarios nos ha llevado a desarrollar uno de los casos, en nuestra opinión, más interesantes: el de la remolacha azucarera (parte quinta). Se ha realizado una programación lineal para localizar espácialmente los resultados de una buena, mediana o mala negociación, concretados en la cuota (A + B) de azúcar asignada a nuestro país, confirmándose plenamente nuestras conclusiones anteriores. El estudio de las consecuencias interregionales de nuestra adhesión se termina con un análisis por Comunidades Autónomas (parte sexta). Tras señalar la importancia del sector agrario en cada CCAA, se insiste en sus rasgos diferenciadores, que explican su capacidad de adaptación y su competitividad en una CEE con doce Estados miembros. Sin embargo, una constante surge a lo largo, sobre todo, de esta última parte: es necesario una cierta coordinación y planificación de todos los esfuerzos: los de la Administración Central, los de las autonomías y los del sector privado. Esta realidad es el centro de nuestro epílogo. No es la primera vez que nuestra agricultura se encuentra, en su historia más reciente, ante una encrucijada decisiva para su futuro. Sin embargo, el desarrollo del Estado de las Autonomías crea una nueva situación, que requiere soluciones innovadoras de concertación entre los distintos niveles de la Administración, que bien podrían concretarse en un plan agroalimentaria nacional.En nuestra opinión, la ordenación de cultivos en nuestro país es hoy necesaria y posible, sin una revisión del título octavo de nuestra carta magna. Depende, en una gran medida, de la voluntad real de los españoles (y de sus representantes políticos) de querer vivir y construir un futuro en común